tag:blogger.com,1999:blog-900520704743868193.post2834398003722578579..comments2024-03-07T22:58:26.050+00:00Comments on El laberinto de la identidad: Contra los pronombres personalesFernando Broncanohttp://www.blogger.com/profile/11429418531791789721noreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-900520704743868193.post-27398457335393953012011-02-17T17:22:21.797+00:002011-02-17T17:22:21.797+00:00Hace un par de años en México se publicó un libro ...Hace un par de años en México se publicó un libro muy peculiar de Gerardo de la Fuente Lora. (1999)Amar en el extranjero: un ensayo sobre la seducción de la economía en las sociedades modernas. México: Media Comunicación. <br /><br />Esto del anonimato... pues no es como salir a la calle sin un duro. <br /><br />En fin, saludos, que en México la cosa es caótica y no hay postura, sólo jóvenes que morirán sin más... sin posturas, sin argumentosAnonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-900520704743868193.post-64604935158746371452011-02-15T22:55:04.865+00:002011-02-15T22:55:04.865+00:00¿Cómo hacer? esa es la cuestión de los niños perdi...¿Cómo hacer? esa es la cuestión de los niños perdidos.Ser un cualquiera "por la extensión de las zonas de sombra sobre los mapas del Imperio", como dicen los Tiqqun en uno de sus manifiestos (http://www.bloom0101.org/como.html). O no. En cualquier caso, la invitación a la revuelta, como la de dejar de ser ciudadanos de López Petit, resulta sugerente en estos tiempos de transparencia tramposa. Aqui les dejo una cita extraída del "¿Cómo hacer?" de los Tiqqun, también conocidos como el Comité Invisible:<br /><br />"El Imperio no tiene lugar. Administra la ausencia haciendo planear por todas partes la amenaza palpable de la intervención policial. Quien busca en el Imperio un adversario al que medirse encontrará el aniquilamiento preventivo.<br />Ser percibido, de aquí en adelante, es ser vencido.<br /><br />Aprender a devenir indiscernibles. A confundirnos. Volver a degustar <br />el anonimato, <br />la promiscuidad.<br />Renunciar a la distinción,<br />Para desarticular la represión:<br />componer en el enfrentamiento las condiciones más favorables.<br />Volverse astutos. Devenir despiadados. Y para esto<br />devenir cualquieras.<br /><br />¿Cómo hacer? es la cuestión de los niños perdidos. Aquéllos a los que no se ha dicho. Los que no son seguros en sus gestos. A los que nada ha sido dado. Cuya criaturalidad, cuya errancia, no deja de traicionarles.<br />La revuelta que viene es la revuelta de los niños perdidos."<br /><br />Y a los interesados en la revista El Estado Mental, aquí les dejo un enlace: www.elestadomental.comEL HOMBRE DELGADOhttps://www.blogger.com/profile/10071515507768737269noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-900520704743868193.post-18254273122929296802011-02-15T19:56:52.868+00:002011-02-15T19:56:52.868+00:00Sobra decir que no he leído el texto que comentas....Sobra decir que no he leído el texto que comentas. Así que mi aportación será sobre tu entrada.<br />Propones una idea bastante interesante: Si el poder sabe casi más de mí que yo mismo, qué sentido tiene esconderse, el caso de casi cualquier distopía del siglo XX llega hasta ese punto. Para muestra Wilson en 1984, se piensa anonymous y el propio Insoc ha creado toda la fábula en la que se cree un activista. Entonces ¿para qué esconderse? Actuar como el anarquista de V de Vendetta solo tiene sentido cuando el Estado (totalitario en el caso concreto de V) tiene los mecanismos de control escacharrados, cuando se ven los intersticios por dónde colarse hasta el mismo centro de operaciones.<br /> La transparencia como forma de resistencia, como una huelga a la japonesa del yo tiene cierta gracia, siempre he sido más partidario de algo así. Abandonar los espacios culturales y dejarse caer al anonimato también tiene su punto, aunque suene más a hartazgo que a una posición concreta. Rodrigo García comentaba algo por el estilo al decir que estaba ya cansado de teatro y que mejor dejarlo (no recuerdo sus palabras precisas). <br />Para ser anónimo basta con no hacer mucho ruido; la verdad que yo me siento bastante anónimo pese a mi esfuerzo por lo contrario. A lo mejor hago poco ruido o a lo mejor meto mucho escándalo que es como no hacer nada. De hecho ¿qué poder no desea ciudadanos anónimos? Supongo que hasta el que puede considerarse anónimo ha tenido el privilegio de elegirlo. <br />Por el momento me quedo con la transparencia, no sé si por gusto o por imposición.Alberto M_https://www.blogger.com/profile/04383745036961886766noreply@blogger.com